Mi único amor es mi único odio,

I was in the winter of my life, and the man I met along the road was my only summer. Memories of him are the only thing that sustained me, and my only real happy times. When the people I used to know found out what I had been doing, how I had been living, they asked me why. But there is no use in talking to people who have a home, they have no idea what it is like to seek safety in other people, for home to be wherever you lied your head.

Amantes del chocolate.

3.6.11

¿Qué pasa contigo, qué pasa conmigo, qué hay entre tú y yo?

No pienses, limítate a sentir. Imaginanos a los dos, en tu moto, camino de la playa. Bajamos por la calle, rotonda tras rotonda. Todo el mundo ya nos conoce, es un pueblo pequeño a la orilla del golfo de Cádiz. Acuérdate siempre, edificio Rompeolas y giramos a la derecha. Me bajo de la moto y tú le colocas el candado que te regalé. Coges nuestra toalla, una botella y un paquete de lucky. Bajamos por las escaleras hasta la playa y, con los zapatos en la mano, nos arrimamos a las rocas, para evitar miradas curiosas. Es una de muchas noches de agosto, nuestras noches de agosto. Sin perder las buenas costumbres, abrimos la botella, encendemos un cigarro y nos tumbamos a contemplar las luces de Cádiz. Pasan las horas y así seguimos, entre besos y abrazos. De vez en cuando un sorbo, una calada, una mirada.. Y otro beso más, y otro, y otro.. Suena mi móvil, sería mi madre, como siempre, a la 1:54, recordándome los 34 minutos que me quedan contigo. Tú sonríes mientras yo lo maldigo todo, me gustaría quedarme así, en nuestro hueco entre las rocas, abrazos, siempre. A las 2:17 me recuerdas que tienes que llevarme a casa, yo me enfado, vuelves a sonreír y me vuelves a besar. Lo recogemos todo y volvemos a la moto. Arrancas, giras a la izquierda y todo recto, rotonda tras rotonda otra vez. Cuando llegas a la última, sueles girar a la derecha, fingiendo equivocarte y haberte olvidado de mí. Yo vuelvo a enfadarme, tú vuelves a reírte y das la vuelta enseguida. Llegamos exactamente a las 2:28 y tú repites cada noche:
- Tengo 30 segundos para decirte lo mucho que te quiero, otros 30 para besarte, otros 30 para controlar mis ganas de raptarte, y a ti te dejo los 30 segundos que quedan para llegar a la puerta y lanzarme un beso.
Y cada noche llegaba a casa a las 2:31, no podía dejar de besarle..

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